Bastante inesperado en nuevo trabajo de Biohazard, máxime cuando no ha pasado aun demasiado tiempo desde que editaran su anterior obra «Uncivilization».
Y la verdad es que a tenor de lo escuchado, toma forma una vez más el famoso dicho de que las prisas no son buenas. Biohazard no rayan aquí al nivel acostumbrado y lo cierto es que el disco es algo soso y flojo. Seguramente no decepcionara a sus fans, porque musicalmente suenan 100% a Biohazard, pero no han logrado ni de lejos el mejor sonido de su carrera y, además, las composiciones poseen menor chispa y originalidad que en ocasiones precedentes.
Apenas cortes como «Never Forgive Never Forget» o «Beateen Senseless» se salvan un poco de la quema, recordando a tiempos tan gloriosos como los de «State Of The World Address», «Kill Or Be Killed» o «Urban Discipline», pero por lo demás el resultado es un tanto mediocre para una banda de la entidad y calidad de Biohazard.
Una autentica lastima, ya que siempre hemos sentido un gran cariño por los neoyorquinos. Esperemos que después del Tour se relajen un poco y se tomen la composición del próximo trabajo de otra forma.
IVAN ORTEGA
