Para los detractores de Manowar que ni siquiera se dignarán a escuchar el disco ahí va la crítica que harían o que les gustaría leer: «¡Pero qué morro le echan estos tíos! ¡No saben como reírse de su público! ¡Sacan otro disco doble en directo con canciones que no conoce nadie y enciman lo rellenan con charlas pregrabadas y sintonías de despedida! Lo único bueno es la portada». Pero como a mí sí que me gustan, y mucho, lo he oído, aunque me acerqué a él con recelo, lo reconozco.
En esta ocasión se han decantado sobre todo por sus temas más épicos y largos (muchos duran 7 u 8 minutos) de sus primeros discos. La sorpresa fue comprobar que canciones que en estudio no me parecieron en su momento nada del otro mundo: «Hatred», «Bridge To Death», «Dark Avenger», «Guyana», «Outlaw», ahora me han convencido completamente y suenan como temas imprescindibles en cada uno de sus conciertos. Por supuesto hay himnos clásicos que todos sus seguidores esperábamos tener en vivo: «Gates Of Valhalla», «Master Of The Wind», «Heart Of Steel», «Blood Of The Kings», y otros no tan clásicos pero que siempre estuvieron en la lista de nuestras favoritas: «March For Revenge», «The Power», «Metal Daze».
Técnicamente, el sonido es bueno, mejor que el anterior «Hell on Wheels Live». La banda sigue como siempre: Karl Logan vuelve a demostrar que es un excelente guitarrista en su estilo, Eric Adams, que tiene una poderosa voz cuando quiere sacarla, Joey DeMaio, que domina su bajo como nadie y Scott Columbus, que cumple su papel.
Un álbum que contentará a los fans más radicales pero que, por la elección del repertorio, despistará a los que sólo conocen sus temas más famosos. Incluso pensarán que lo que hay aquí son canciones nuevas.
DAVID FRAILE.
